Mckenzee Pierce va a ver algo de arte que su padre podría comprarla para su regalo de bodas, pero cuando ella llega a la casa del vendedor, él la confunde con su asistente que llega tarde a ayudarlo a llevar el arte a la subasta. Después de que se presente un golpe total, Mckenzee le dice al traficante que necesita relajarse, y ella le ayuda a hacer justo eso poniéndose de rodillas, chupando su polla, y sacando sus enormes tetas para que pueda follar las mismas, y su coño, con su gran polla!