Danny ha subido la escalera al estatus ejecutivo, así que ahora tiene acceso a una de las ventajas ejecutivas: entrenamientos de alto nivel con un entrenador personal. Sin embargo, está confundido cuando llega a una casa y no a un gimnasio, pero el entrenador, Capri Cavanni, dice que está en el lugar correcto, y lo invita a entrar. Pero Danny observa y se entera de que su entrenamiento no implica ningún tipo de ejercicio de gimnasio; más bien, Capri está allí para darle el entrenamiento de su vida dejándole follar las luces del día de ella después de que ella endurece su gran polla con una mamada húmeda! Finalmente lo lohacon.