Estoy loco o realmente atrevido. Siempre pensé que era tímido, pero después de ver a ese tipo en el ascensor y descubrir que estábamos en el mismo piso del hotel, supongo que no lo estoy. Porque al instante lo invité de vuelta a la habitación y follamos como si el día no terminara. Y qué bueno que hice, porque fue la mejor hora sexual de mi vida hasta ahora. Una enorme polla en mi coño y una carga caliente de semen en mi garganta, y ni siquiera creo que tenga su nombre. Sólo vives una vez, ¿verdad?