Mi matrimonio solía ser divertido. Mi marido y yo solíamos salir y pasar un buen rato, ir a bares, hacerse tatuajes, ir de compras. Pero desde que fue despedido no hemos podido hacer nada. Hasta que conocí a Rocco. Cuando Rocco tiene tiempo, hago tiempo. Porque Rocco sabe cómo cuidarme. Compras, diversión, facturas.cualquier cosa. Se encarga de todo eso ¦ y yo me ocupo de él, de la manera que quiera. Al final, estoy ayudando a mi matrimonio, porque necesitamos este dinero. Todavía estoy bien con mi marido, y todavía lo amo. Pero tengo que hacer lo que tengo que hacer.